... por los Jeremes Rojos y por su líder, Pol Pot, los Camboyanos salieron de las grandes urbes hacia el campo creyendo que, corrían peligro de ser bombardeados por los cazas americanos si se quedaban en las ciudades. Los que no huyeron fueron expulsados o simplemente asesinados. Se declaró a los habitantes de la ciudad como enemigos del Estado, desapareció el comercio, el arte, las escuelas, toda forma de libre expresión. Se obligó a la gente a cultivar los campos de arroz, al borde de la malnutrición.
Haber trabajado en una oficina, hablar un idioma extranjero, ser deportista, abogado, médico o simplemente llevar gafas era motivo suficiente para ingresar en un campo de concentración o ser ejecutado. Así unos dos millones de personas sufrieron las más crueles torturas para luego ser asesinados. Les arrancaban las uñas, y para ahorrar balas, se conducía a las victimas a una fosa y se les arrojaba.
Todo esto sucedió hace menos de 35 años, ya que la toma del poder por Pol Pot comenzó en 1975, sinceramente ¿habías oido hablar de Pol Pot?
Supongo ke un pais como camboya que no tiene ningun recurso natural importante y que estas bastante poko desarrollado no interesa a nadie. Si hubiesen tenido petroleo o litio hubiese sido otra cosa.
ResponderEliminarEn un país como Camboya, el dinero recaudado en los diferentes templos sagrados del bosque (Angkor, por ejemplo) va casi en su totalidad a empresas de la propiedad de un conocido mandatario venezolano
ResponderEliminarEsto es bastante más común de lo que se piensa. En algunos países del centro/sur de África, mucha de la gente que muere de hambre son cultivadores de piñas u otros productos tropicales. Tienen que elegir entre el hambre o el rifle del capataz si se les ocurre tocar una piña...
ResponderEliminarEl problema no es que le interese a alguien o le deje de interesar … el problema es que no interesa que se den a conocer.
ResponderEliminarO a caso han terminado todos los conflictos armados de Africa? Cuando algún dirigente o periodista muera volverán a ser noticia … mientras tanto los niños limpiabotas del Perú seguiran inalando los nocivos vapores de los abrillantadores (como ejemplo de un viaje muy fructifero de nuestros principes a Peru)